Israel quer contruir uma "nave" de 200 metros.
"El Mundo"
FUNCIÓN MILITAR Y CIVIL
EFE
JERUSALÉN.- Las Industrias Aeronáutica de Israel (IAI) están empeñadas en la construcción de un 'avión' de 200 metros de longitud por 60 de ancho que podrá fotografiar objetivos militares o civiles a 1.000 kilómetros de distancia desde una altura de 21 kilómetros.
"Será una nave aérea con las dimensiones de un estadio de fútbol, algo nunca visto en el mundo", dijo el ingeniero Avi Baum, director del proyecto de las IAI, informa el diario Haaretz.
El proyecto, actualmente en estudio, es supervisado por empresas de armamento y cuenta con la aprobación del Ministerio de Defensa, informa el rotativo israelí. El primer prototipo del "barco aéreo", no bautizado aún, terminará de montarse en el año 2008.
Más barato que los satélites
"Pensamos en hacer algo más barato que un satélite después de observar el espacio por el cual no transitan los aviones ni los satélites", declaró Baum al relatar que la idea para el proyecto data de mediados de la década de los noventa.
La plataforma aérea operará desde una posición geo-estática a una altura de 21 kilómetros. "Las fotografías serán de alta resolución y podrán captar el número de la licencia de un coche en marcha por una carretera", comentó el ingeniero.
Además de cumplir misiones de espionaje militar, servirá como plataforma de comunicaciones en el campo de la televisión, entre satélites espaciales y el planeta, entre aviones, como monitor del tráfico terrestre y naval, y para informaciones meteorológicas.
Como una 'nave espacial'
En rigor, dijo Baum, la aspiración de crear una "nave espacial" de esas dimensiones no es nueva y hasta la fecha constituye un desafío tecnológico sin solución: proporcionar a un avión la capacidad de mantenerse en una posición geo-estática, y servir como una especie de torre aérea de observación sobre un área específica.
El ingeniero de las IAI destacó que ese avión gigante podría operar sin necesidad de un piloto y mantenerse durante tres años en una posición o cambiarla por orden de una estación en tierra a la que trasmite sus fotografías o de la que recibe órdenes.
Una ventaja del "barco aéreo" en relación con los satélites que cumplen funciones similares desde el espacio sería la de que podría ser devuelto a tierra sin riesgos para ser sometido a arreglos a fin de cambiar sus equipos por otros más evolucionados, y volver a su misión.
Energía solar
Uno de los principales desafíos para los expertos, indicó Baum, será la fabricación de los paneles destinados a colectar suficiente energía solar que deberán transformar en la energía eléctrica para el consumo de la nave y de sus equipos electrónicos.
Las IAI tendrán que conseguir de 100 a 150 millones de dólares para la construcción de la aeronave. MLM, la división de las IAI a cargo del desarrollo del proyecto, está buscando un socio internacional, informó Baum, y también asociados industriales.
La compañía estadounidense Lockheed Martin, dijo el ingeniero, está trabajando actualmente en un proyecto similar, y las IAI le han informado del suyo, lo que tal vez puede generar una fusión de los esfuerzos, informa el rotativo de Tel Aviv.